La mejor forma de viajar a Islandia probablemente sea coger un avión a la capital Reykjavik, situada al suroeste del país en la costa del Mar Atlántico.
El aeropuerto más grande de Reykjavik es el Aeropuerto Internacional de Keflavik, situado a una distancia de 50 kilómetros de Reykjavik hacia el suroeste. Keflavik abarca todos los vuelos internacionales de Islandia estando conectado con las mayores ciudades Europeas, así como con Estados Unidos y Canadá, además de algún vuelo doméstico.
Sin embargo la mayoría de los vuelos domésticos dentro de Islandia se operan desde el Aeropuerto de Reykjavik, el segundo aeropuerto más importante del país, situado a una distancia de unos 5 kilómetros del centro de Reykjavik. Además del tráfico doméstico, desde el Aeropuerto doméstico de Reykjavik se operan vuelos charter a algunas ciudades europeas, así como vuelos a Groenlandia y a las Islas Feroe.
Otros aeropuertos a destacar en Islandia probablemente sean el Aeropuerto de Akureyri al norte del país, así como el Aeropuerto de Egilsstaðir al este del país, el aeropuerto de la isla de Grímsey, el aeropuerto de Ísafjörður en el extremo noroeste de Islandia, el Aeropuerto de la isla de Vestmannaeyjar y los aeropuertos de Vopnafjörður y Thorshofn situados al noreste del país.
Las aerolíneas más importantes en Islandia son Icelandair, Iceland Express, Wow Air y SAS (Scandinavian Airlines), además de otras compañías que operan vuelos a Islandia en la época veraniega como Norwegian, Easyjet, Delta Airlines, Lufthansa, Air Berlin, Germanwings, Air Greenland, Transavia France o Niki Airlines.
En cuanto a los vuelos de bajo coste a Islandia, la compañía Wow Air ofrece vuelos baratos a Reykjavik desde 13 destinos Europeos.